Digo yo, que el docto Doctor, afortunadamente en Económicas, perfectamente puede dar un rodeo por Caracas para no pasar por Tordesillas si tan horroroso le parece, poca cosa a lomos de nuestro "Dragon Rápide" de turno.
Usted y sus patriarcas nunca van a quitar el Ministerio de Defensa. Eso no se lo cree nadie. Otra cosa es el envoltorio. Estaría muy bien llamarlo Ministerio para la Reeducación de la Ciudadanía (tipo chino) con sus campos de reeducación (al estilo del camarada Uliánov supongo), sus "paseos" con lo cual podría hacerse una extensión de Cuelgamuros y ya de paso ponemos un T.O.P. (con otro nombre, claro) y una ley de vagos y maleantes o así, que se podría llamar Ley de Vicios y Costumbres, por ejemplo y a las "Fuerzas de Orden de la Ciudadanía se le podría endosar un sindicalista, liberado por supuesto, a modo de comisario político.
Y todos tan felices. Quitará el Ministerio, camarada Doctor, pero no quitará las fuerzas armadas las cuales, politizará y potenciará.
Esto me recuerda cuando en el bachirerato francés estudiaba geografía política y económica de Europa y llegados a Alemania teníamos dos, a saber: La República Federal Alemana que era la democrática y la República Democrática Alemana en la cual, pese a su nombre, estuvieron unos cuantos años de cuarentena.
Así que, no me "camaleonice" el invento que se le ve el plumero, que dicen en mi tierra.
Vaya ladrillo ¿eh? Debe ser la costumbre de leer a Marcial Lafuente Estefanía o ver cine de ciencia ficción, para el resto, parafraseando al Tenorio:
"Fui al ejército de España;
mas todos paisanos míos,
soldados y en tierra extraña,
dejé pronto su compaña
tras cinco o seis desafíos.
Nápoles, rico vergel
de amor, de placer emporio,
vio en mi segundo cartel:
Aquí está don Juan Tenorio" para quien quiera algo de él.